Las lámparas espectroscópicas, también conocidas como lámparas de espectroscopia o fuentes de luz, son dispositivos emisores de luz especializados que se utilizan en diversas técnicas espectroscópicas para analizar la composición de los materiales en función de su interacción con la luz. La espectroscopia es el estudio de cómo la luz interactúa con la materia y proporciona información valiosa sobre la estructura y las propiedades de moléculas, átomos y otras partículas.
Las lámparas espectroscópicas están diseñadas para emitir luz en una gama específica de longitudes de onda, lo que resulta crucial para realizar análisis espectroscópicos.
Las distintas técnicas espectroscópicas, como la espectroscopia de absorción, la espectroscopia de fluorescencia y la espectroscopia de emisión atómica, se basan en la interacción entre la luz y la muestra analizada. La luz emitida o absorbida transmite información sobre la composición química, la concentración, la estructura molecular y otras propiedades de la muestra.
Existen varios tipos de lámparas espectroscópicas, cada una de ellas adecuada para aplicaciones específicas:
Las lámparas espectroscópicas son un componente esencial de la instrumentación espectroscópica, que permite a los científicos analizar y estudiar las propiedades de diversos materiales y compuestos. La elección de la lámpara depende de la técnica espectroscópica específica que se utilice y de la gama de longitudes de onda necesarias para el análisis.
Las lámparas espectrales son lámparas de descarga que emiten los espectros lineales de gases inertes y vapores metálicos con alta luminancia o intensidad radiante. Se utilizan cuando se requiere un espectro lineal o radiación monocromática.
Lámparas espectroscópicas: Fuentes de luz especializadas para espectroscopia